domingo, 10 de agosto de 2008

Tisha B'Av

La voz del poeta Darwish se silencia en un día de fiesta para los judíos, un día para recordar la expulsión de los judíos de España, de Inglaterra y Francia (por cierto, estas dos últimas, anteriores en el tiempo a la nuestra, que los Reyes Católicos no fueron los primeros en iniciar esa lamentable caza de los hebreos). Una jornada para acordarse de los exiliados, como los más de tres millones de palestinos que pululan por el mundo a la fuerza, porque un día se les arrancó la tierra bajo sus pies. Refugiados como Darwish, por ejemplo. Hoy es Tisha B´Av, el día más triste. Jerusalén se ha puesto hermosa; Ramala, de luto. Siempre las dos caras en esa tierra.
P.D.: La fotografía, de Getty Images by AFP.

4 comentarios:

Anónimo dijo...

Lo duro y lo bello de esa zona, las contradicciones

El bit errante dijo...

Qué poco nos llega ya de esa tierra que no sean balas, bombas, sangre, heridas, muertes... Cuando tienen tanto para dar que no conocemos: tanto sentimiento, tanta vida... Gracias por descubrirme a este poeta.

THE LITTLE QUEENS dijo...

¿Que es lo que tienen que dar que no conocemos? ¿Que los israelies tienen tanta vida?
Lo siento, a veces me sofoco con mis propios pensamientos, pero si fuera asi algo harian para cambiar la realidad y dejar de asesinar a los palestinos.

Unknown dijo...

No se puede ser tan ciego, reina. Mira a la otra parte que no son todos unos carniceros...