jueves, 28 de agosto de 2008

Bernard Lewis

3 comentarios:

Anónimo dijo...

san Peckinpah dice:
La religión, qué gran invento. Su principal utilidad es ocultar la ignorancia.
Me acojona que unos cuentos (biblia, torah, corán) que escribieron pastores y agricultores recién salidos del neolítico, que desconocían la penicilina, el teléfono, el mechero o los Rolling Stones tengan esa ascendencia y poder sobre la vida de ciertas personas(demasiadas), y que encima se la quieran imponer a los demás, que tenemos la mala suerte de intentar usar esa parte del cerebro que inutiliza la creencia en un ser extraterrestre.
Y NO, NO RESPETO a los creyentes. Pueden ser cultos e inteligentes, pero sin duda tienen una tara intelectual importante. Lo único que los ampara es la libertad que tenemos todos de ser unos cretinos, cada cual a su manera.
SALUD Y NIETZSCHE

Unknown dijo...

Amén, compadre

Unknown dijo...

A éste pollo me refería, demasiado poco amigo de los palestinos, por ejemplo. San Peckinpah, a ver si te haces un blog tú solo, porque es fantástico todo lo que escribes.
Salud, compadre