
El primer lunes de abril de 1625, en la aldea de Meung, comenzaba la historia de amistad más intensa que han visto los siglos: la de Athos, Porthos, Aramis y D' Artagnan. Con el mismo espíritu que alentó a los cuatro magníficos abre hoy esta humilde posada al borde del camino. Para que los míos (y los invitados) se acerquen a compartir la vida. Que Dios o el Diablo os guarde...
martes, 28 de octubre de 2008
Y otro más

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5 comentarios:
Totalmente de acuerdo, Carmen.
Lo mismo digo. Viva Arrazua, coño!
Sigo diciéndote lo que te decía en la Facultad: que es soso escribiendo, aunque saca unas historias muy buenas. Dicen que está muy malito, que ni ha recogido él el premio... No es por asustarte, pero esa visita que dices que vas a hacer (a la que no me has invitado, canalla) debe ser pronto...
Más madera:
http://periodistasenguerra.blogspot.com/2008/11/homenaje-manu-leguineche.html
Saludos
Viva, Sira, viva, cómo te puede la tierra, coño
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