
El primer lunes de abril de 1625, en la aldea de Meung, comenzaba la historia de amistad más intensa que han visto los siglos: la de Athos, Porthos, Aramis y D' Artagnan. Con el mismo espíritu que alentó a los cuatro magníficos abre hoy esta humilde posada al borde del camino. Para que los míos (y los invitados) se acerquen a compartir la vida. Que Dios o el Diablo os guarde...
viernes, 5 de septiembre de 2008
El hombre que sale de la oscuridad

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2 comentarios:
Chincha, que ya lo tengo...
Bueno, a ver, porque tengo tanta lectura pendiente, pero me la apunto..
Con retardo, te contesto a alguna cosa de la que dejaste en mi blog. Un periódico… adoro la prensa escrita, y escribir, aunque mi futuro profesional me está llevando por otros derroteros que también me apasionan…
Me alegro del encuentro, es una de mis mejores amigas, y me emocionó que trabajara contigo. Espero un encuentro no muy tarde.
Kisses miles
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