martes, 20 de noviembre de 2007

Precariedad, dependencia, intrusismo

Los salarios bajos son el principal problema de los periodistas
19.nov.07

La baja remuneración se ha convertido en el principal problema para aquellos que ejercen el periodismo en España. Así lo cree el 59,6% de los profesionales, según recoge la encuesta sobre Autoestima e Identidad de la Profesión Periodística realizada por Demométrica e incluida en el Informe de la Profesión Periodística 2007. El Informe, editado por la Asociación de la Prensa de Madrid (APM) y dirigido por el profesor de la Universidad de Málaga, Pedro Farias, se presentará en la Asociación de la Prensa de Madrid el próximo 3 de diciembre, a las 12 horas.

El intrusismo laboral continúa siendo el segundo mayor problema para el 44,3% de los periodistas encuestados. Le siguen la falta de independencia debida a presiones políticas o editoriales (18,8%) y la precariedad laboral, que ha cosechado un 17,6%.


Aumentan los contratos indefinidos

El porcentaje de contratos indefinidos ha pasado del 64,6% del total en 2006, al 72,4% en 2007. Este incremento, tal y como explica el informe, no supone una reducción de contratos temporales, sino la pérdida de importancia de otras relaciones laborales más inestables, como las colaboraciones. El porcentaje de periodistas empleados se ha elevado hasta el 36,9% en el ámbito de la prensa (33,7% en 2006), y el 18,2% en el de la radio (14,8% hace un año). El peso de la televisión ha menguado apenas dos puntos (19,7%), mientras que el de las revistas se ha reducido “considerablemente” del 10,5% en 2006 al 5,4% en 2007. El estudio señala que se observa un tímido aumento de la importancia para el empleo en los medios digitales, que alcanzan ya el 2,5%.
Fuente: Asociación de la Prensa de Madrid. http://www.apmadrid.es/

1 comentario:

Unknown dijo...

A mí lo del intrusismo me da igual, tengo amigos más periodistas que nadie que son fisicos o lingüistas de carrera. Lo de la precariedad sabéis que es mi cruz. ¡No puedo seguir limpiando platos! Voy a tirar la toalla, me parece.