El factor Clinton, el factor Emanuel

Damon Winter/The New York Times
Barack Obama and Hillary Rodham Clinton campaigning in Florida in October.-

Dice el New York Times que Hilary Clinton es la virtual secretaria de Estado en el equipo de Obama. Parece evidente que será un gran valor añadido al gabinete del nuevo presidente, pero me interesa especialmente lo que tiene que decir respecto al conflicto en Oriente Medio. Su marido ha sido el único presidente estadounidense que ha impulsado, de veras, el proceso de paz en los últimos 20 años. No era el mesías, no dio soluciones, pero lo intentó. En su haber está el haber mantenido vivo el debate, al meno eso. Annapolis, débil intento de resolución que en 2009 debe declarar la creación del Estado palestino, es lo que es porque antes se trabajó en Wye, Camp David, Taba, la Casa Blanca. Y eso lo hizo Clinton, Bill Clinton. Su mujer siempre fue una encendida defensora de lo que su esposo hacía en la zona pero en su campaña, como todos, demócratas o republicanos, se ha dejado financiar por los judíos y no ha osado hablar de independencia palestina. ¿Cuál será su postura ahora? Su nombramiento, como todo el equipo de Obama, es esperanzador, pero en su justa medida. La presencia de Rahm Emanuel como jefe de gabinete de la Casa Blanca introduce bastante más incertidumbre. Crítico ya no con Hamás sino con la OLP y Fatah, hijo de un independentista israelí que recurrió hasta al terrorismo para lograr su hogar, tiene mucho que decir. Pero también él fue asesor del señor Clinton, y no evitó su implicación. Dicen las malas lenguas que Obama se está dejando aconsejar en exceso por su curtido compañero. Que ya ha delegado demasiado en él, convirtiéndolo en el máximo interlocutor con los republicanos. Que le puede comer terreno. ¿Influirá eso en su posición sobre el conflicto? De nuevo, a esperar y confiar.